¿Los​ ​implantes​ ​dentales​ ​son​ ​para​ ​ti?

Aparte de tener una función básica en nuestras vidas para facilitar nuestra alimentación, nuestra dentadura es una de nuestras cartas de presentación. Las personas que tienen contacto con nosotros pueden percibir muchas cosas a través de cómo ven nuestros dientes; mostrando una apariencia sana, estética, ayuda a crear una buena impresión y mejore las condiciones en nuestras relaciones interpersonales, sean casuales, sentimentales o referentes a tu vida profesional. 

Regresando a las necesidades primarias de nuestro cuerpo, el proceso de masticación se dificulta cuando nuestra dentadura está incompleta, produciendo mayor tensión y desgaste en los dientes cercanos y los que hacen directa oposición a los espacios donde se hayan perdido piezas; en dichas situaciones se aumenta el riesgo de que se muevan de posición, se aflojen y pierdan otros, al no tener el mismo apoyo estructural.

La invención de los implantes dentales han revolucionado a la odontología, pues ayuda en restablecer la apariencia y la estabilidad de nuestra dentadura en casos que se hayan perdido dientes por accidentes o problemas de salud. Pueden servir para reemplazar una o varias piezas, habiendo varias técnicas para abordar el problema. Los implantes están hechos de titanio que simulan la raíz de un diente normal y pueden apoyar coronas, puentes y sobredentaduras; gracias a su material y aplicación, son altamente durables mientras que se les den los cuidados regulares de aseo con cepillo e hilo dental, además de revisiones rutinarias.

Aunque su utilización masiva de implantes dentales se ha dado en recientes décadas, comenzó su popularización en los años cincuentas, ya que se descubre la compatibilidad del metal titanio con los huesos y tejidos, por lo que se comienza a utilizar en varias intervenciones médicas. En la actualidad, el proceso se ha hecho cada vez más práctico, ya que en quince minutos se puede realizar la cirugía; en una sola cita se puede recuperar la sonrisa completa.

Aunque los puentes y placas dentales siguen siendo procedimientos utilizados, tienen algunas desventajas, como la acumulación de placa bacteriana que con el tiempo puede producir caries, infecciones en nuestras encías; por el contrario, los implantes dentales son virtualmente similares a tus dientes naturales, haciendo que su limpieza y mantenimiento no sea complicado.

¿Cómo saber si eres apto para los implantes dentales? El principal indicador es que haya suficiente densidad en los huesos maxilares; esto es necesario para que la fusión con el implante sea óptima. La fijación definitiva ocurre en un periodo de tres a seis meses, por lo que en ese tiempo el paciente deberá tener mucho cuidado con su alimentación, lo que bebe y su aseo dental. Una persona con baja densidad ósea corre el riesgo de necesitar intervenciones correctivas en caso de que alguno de los implantes se afloje; el especialista podrá verificar si puede aplicarse el implante directamente o si necesita alguna preparación adicional, como el levantamiento del seno maxilar para zonas donde el hueso se haya dañado.

Existen algunos otros casos que puedan representar menores probabilidades de éxito, como enfermedades en las encías o el hábito de fumar, por lo que será trabajo del especialista hacer una evaluación completa antes de proceder.

Date la oportunidad de lucir una linda sonrisa, recupera tus piezas con implantes dentales.