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miércoles, 4 de octubre de 2017

¿Cada​ ​cuánto​ ​debemos​ ​ir​ ​al​ ​dentista?

¿Cada​ ​cuánto​ ​debemos​ ​ir​ ​al​ ​dentista?

La resistencia de nuestros dientes y nuestros hábitos pueden tener un doble filo. Siendo que los dientes están hechos para el castigo, soportando la presión de la quijada para triturar comida todos los días, con frecuencia podemos dejar por sentado que solamente con cepillarlos estaremos haciendo lo necesario para su mantenimiento. A mayor conciencia, los que utilizan hilo dental para remover cualquier desecho acumulado en los espacios entre cada pieza, pero los problemas que pueden aparecer son producidos por elementos microscópicos que podemos atenuar pero siempre están presentes.

La examinación personal se limita a una inspección general mientras nos lavamos los dientes, limitados a lo que podemos ver frente al espejo; al menos en un hogar no se tiene una forma de examinar a fondo y no se tienen instrumentos o el conocimiento para saber si existen problemas en potencia. Por ello, más allá de qué tan buena sea tu alimentación y tus cuidados en limpieza, la recomendación es de que hagas visitas al dentista para tener su opinión.

En cuanto a la frecuencia de las visitas al dentista, las opiniones giran en torno a dos veces al año como ideal, para revisión y limpieza del público en general. Variaciones a esta referencia dependerán de casos particulares y sus respectivos hábitos alimentarios, higiene y condiciones de salud. Por ejemplo, para personas en situaciones de alto riesgo posiblemente deban hacer visitas cada tres o cuatro meses, incluso en periodos más cortos, como en casos de personas que fuman, embarazadas, diabéticos, personas que sufren de alguna enfermedad en sus encías, entre otros.

Además de la prevención, entre las razones para programar visitas al dentista están:
  • Cualquier indicio de dolor en la zona de dientes, que puede ir de mano con una inflamación en boca, cara o cuello.
  • Las encías están hinchadas y sangran cuando te cepillas los dientes o utilizas hilo dental.
  • Salen fluidos de área donde haya dolor dental.
  • Tienes implantes o utilizas algún otro tipo de prótesis dental. Deben monitorearse para asegurar que todo está en orden.
  • Tienes alguna condición médica (cardiovascular, diabetes, problemas alimenticios) o sigues algún tratamiento.
  • Durante embarazos, algunos problemas dentales tienden a complicarse.
  • Dificultad al masticar o ingerir alimentos.
  • Eres fumador.
  • La quijada hace ruidos al abrir y cerrar o mientras comes (posible mordida irregular)
  • Cualquier trauma en la zona dental, para su rápida atención. Rotura, astillamientos, desalineación o pérdida total de piezas por golpes. Heridas en el interior de la boca.
  • Llagas o aftas en el interior de la boca. Pueden ser causados por infecciones o irritación por irregularidad en mordida, filos en brackets o prótesis dentales.
La prevención y la consulta inmediata en caso de eventualidades hará que los problemas con tus dientes, en caso de aparecer, sean en su mayoría resueltos por Especialistas en Odontología sin procedimientos complicados, buscando conservar tu dentadura natural.

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